domingo, noviembre 27, 2005

Coffee, please ...

Después de bastante tiempo, hoy fui al cine. Después de sortear hordas de Harrys y Hermiones, acompañados con sus padres, pude hacerme de una entrada para Coffee and Cigarettes. Fue lo único que me tincó, aparte de la del mago con la cicatriz, pero de la que no habían entradas ni para el mismísimo Daniel Radcliffe.

Coffee and Cigarettes es una serie de historias (11 en total), que surgen con un par de personajes, una mesa cuadriculada como ajedrez, un par de tazas de café y naturalmente cigarrillos. La mayoría de las historias son absurdas, como la inicial (Strange to meet you) donde Roberto Benigni conoce a un tipo, hablan incoherancias durante cinco minutos y finalmente lo reemplaza en su cita al dentista. Otra absurda (Jack shows Meg his Tesla coil): Jack White le explica a Meg White - por si no lo saben, son los integrantes de The White Stripes - como funciona la bobina de Tesla. La historia más entretenida, o al menos pasable, es Cousins? una en que Alfred Molina le explica a Steve Coogan que hizo un estudio genealógico y encontró que eran primos.

Yo me reconozco amante de lo absurdo. Pero de un absurdo que sea sorpresivo, entretenido. En este caso, estamos frente a un absurdo fome y aburrido, salvo un par de casos excepcionales. No lo logró salvar ni la aparición de Bill Murray (Delirium), ni la teoría conspirativa de Elvis de Steve Buscemi (Twins). Que me perdonen los seguidores de Jim Jarmusch, pero a esta película solo puedo darle mi más eterno bostezo.

Lo más absurdo de todo, es que aún presentando situaciones realmente fomes, no faltaban los individuos que se reían a carcajadas. ¿Probablemente para llamar la atención? ¿Para demostrar un humor fino? A todos ellos, mis queridos amigos, les declaro muerte cerebral. Y los sentencio a ver una temporada completa de sketchs de Cristián García-Huidobro.

Si después de esta crítica aún se atreve a ir a verla, lleve harto café. Si puede lleve cigarrillos, pero de esos verdes que están prohibidos. En una de esas logra entender lo que yo no entendí. Avísenme.