lunes, enero 02, 2006

El día del abrazo

Si hay algo que me da lata del año nuevo es la cantidad de abrazos que hay que dar. En la oficina, debieran dar una semana completa de vacaciones hasta que a la gente se le olvide la mala costumbre de invadir el metro cuadrado propio. Hoy contabilicé 52 abrazos, casi todos sin moverme de mi escritorio. Gente que se pasea puesto por puesto, deseando felicidad, suerte, éxito, dinero, que tenga un bonito año, salud, trabajo y mi favorita: que se le cumplan todos los deseos. Es de las frases cliché del estilo "Sentido Pésame". Eso sumado a abrazos de todos tipos: bien apretados, de lejitos, cuneteados, palmetazos potentes, jugosos, cariñosos, indiferentes, besuqueados, masajeados. Y yo lo único que deseo de verdad es que se dejen de palmetearme y que pase luego esta ola de cariño postizo.